Ay, Raquel, Raquel... Tengo muchas cosas que contaros de Raquel Ortega, también en calidad de agente literaria, pero me temo que hoy solo me puedo circunscribir a su última novela, El eco del bosque, porque hablar de futuras sería haceros spoiler de lo que se viene próximamente. 

Raquel Ortega es una escritora de terror y misterio cuya primera novela, No despiertes al diablo, fue ganadora del Premio Amazon 2022. Raquel ha continuado con El eco del bosque en la misma línea de misterio paranormal y argumentos oscuros, aunque quizás, en esta última, con un tono más policiaco y de thriller. Veamos qué nos vamos a encontrar en ella. 

Lo primero que tenemos es a una familia desestructurada que acaba de mudarse al pueblo natal de su padre en Irlanda, una ubicación que me gusta mucho. Contamos con dos hermanas y un hermano pequeño, así como con el padre, un poli que le pega bien duro a la bebida. El cliché de personaje atormentado, la verdad, no me molesta en absoluto. Tanto Killian (el padre) como Joselen (la protagonista) parecen dos personas a las que les rondan sus propios demonios y esto es un libro de terror/misterio siempre es un punto a favor. La psicología de los personajes queda bastante clara desde el inicio y es muy adecuada para la historia que Raquel pretende contar.

Algo que quiero señalar antes de seguir con la reseña es que, además, el hermano pequeño, Lorcan, tiene una discapacidad visual que nos saca también del tipo de personaje normativo de las novelas. Y sin ir más lejos, Lorcan es el primero que nos dará un susto en el libro.

También debo hablaros de la ambientación. El mal rollo que se vive en ese pueblo es patente y, además, Ortega tiene la manía de meter elementos como sótanos, ruidos extraños en la casa, oscuridad... hasta gatos inquietantes que no te dejan leer tranquila. Siento muy cómoda a la autora en el género, desde luego.

Como ya os he dicho, Lorcan nos dará el primer susto y con él veremos también que hay mucha acción desde el principio. Los hermanos casi que no tienen tiempo para lamentarse por el cambio de lugar porque pronto comienzan a pasar cosas raras. Creo que fue la propia Raquel quien me dijo que veía este libro más como un thriller, pero no sé qué decirte, pienso que también da miedo. Seguramente que los amantes del terror puro y duro necesitan aún más adrenalina, pero dejadme que os resuma las sensaciones que yo tenía a mitad del libro con una descripción sencilla del mismo: 

Amigos invisibles

Un pueblo al que no me gustaría ir de viaje

Un bosque escalofriante

Y muertes extrañas


¿Solo un thriller? Y yo multimillonaria, no te digo.

Aún no os he hablado de las muertes. Un cuerpo sin vida tiene al papá de Joselen y cía bastante preocupado. De hecho, a toda la Garda. Y no será el único fallecimiento que encontremos en la novela. Además, todo esto mientras avanzamos sin freno hacia el día de San Patricio en un pueblo que, además de dar mal rollo como ya he dicho, está lleno de leyendas y supersticiones.

Por último, también quiero volver a los hermanos para comentar algo. Cada uno de ellos pone un punto de terror en la historia, pues aunque parece que a Joselen le acontecen experiencias más reales como una pelea en un callejón, Maeve sufre de alucinaciones, que nos harán dudar de todo, y Lorcan tiene una amiga invisible que cada vez va teniendo más presencia en la trama.

El eco del bosque es un librazo que contiene todos los elementos que esperas de una novela de misterio y terror. Raquel Ortega se desenvuelve en ella de maravilla, creando una ambientación buenísima y metiéndote en varios hilos argumentales que no tienes ni idea de cómo van a acabar. Porque creo que Raquel Ortega ha demostrado que se puede acabar dándole lugar a TODO. Hay muertes sí, pero también cosas inexplicables. Y un bosque que no te deja de llamar.