Llega una fecha muy señalada para hablar de este tipo de libros, aunque, realmente, por su poder divulgativo, deberíamos hablar de ellos durante todas las épocas del año. Se trata de La intuición de las brujas y no tiene nada que ver con una novela de fantasía o con un tratado de magia, sino con una forma de conexión que silenciamos, las mujeres más que ningunas, desde muy pequeñas: nuestro poder interior.
La intuición de las brujas ha sido escrita por Cinthya González, psicóloga y feminista, con más de nueve años de experiencia acompañando a mujeres de diferentes nacionalidades en sus procesos psicológicos.
Lo primero que llama la atención de la obra es su contenido tan visual. La maquetación está cuidada al detalle y lista para sumergirnos en diferentes estados mágico-místicos de conciencia de una misma. Lo segundo, la practicidad. Sin duda alguna, La intuición de las brujas está repleta de pequeños ejercicios y preguntas para avanzar en nuestro desarrollo a medida que vamos pasando las páginas. De hecho, lo primero que te pide que te plantees es qué significado tiene para ti la palabra bruja.
Hace un barrido por el momento actual (¿Cómo te sientes emocionalmente?), pero también genealógico. Y lo que para mí, personalmente, más valor ha tenido, es que Cinthya, en todo momento, te recuerda que no necesitas un gurú para ser una bruja. Es decir, que no es necesario seguir a nadie ni llevar a rajatabla unas reglas para poder llegar a ser lo que sea, sino que, al final, lo que necesitas (y aunque esto quede muy cliché) está en tu interior.
Me gustan los libros que, de alguna manera, te hacen dudar incluso de su propio contenido. Esos autores y autoras que se atreven a expresar que lo que ellos comunican no tiene por qué ser una verdad absoluta. González va en esta línea.
Pero hay algo mientras lees La intuición de las brujas que te hace conectar de manera simpática con ese poder interior. No hace falta que Cinthya González te convenza, porque la amabilidad de las páginas, su colorido, sus dibujos y sus mensajes cero forzados, te acunan en la tranquilidad de tu casa (o sitio donde estés leyéndolo).
Se acerca la época de las brujas, Samhain, Halloween,... Y, como he dicho al principio, La intuición de las brujas de Cinthya González parece una lectura ideal. Pero no quiero dejarme llevar por la palabra bruja de la portada para asociarlo necesariamente con estos días porque bruja somos cada minuto y segundo en el que decidimos elegirnos y mostrarnos tal y como somos.
¡Antes de marcharme!
Me he dado cuenta de que apenas he hecho caso a otra parte importante de la obra: la intuición. La verdad es que me ha sorprendido que no es una obra únicamente dedicada a ello. La mitad del texto habla de otros temas y no es hasta la página 151 (de 201 páginas) en donde tenemos una dedicación total a la intuición. ¡Así que creo que es mejor transmitir el mensaje de que La intuición de las brujas de González abarca un abanico mucho más amplio de cuestiones interiores y exteriores poderosas y sabias!
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