Vanessa Springora (París, 1972) es editora, escritora y cineasta. El consentimiento es la noticia más aplaudida por la prensa mundial, como reza el titular de este artículo. En él, no solo se cuestiona la intelectualidad francesa sino que se narra la historia que la autora vivió con Gabriel Matzneff, escritor y depredador sexual. Este testimonio personal de Vanessa Springora será editado por Lumen y llegará a librerías el 17 de septiembre de 2020.

El consentimiento de Vanessa Springora.

El consentimiento es la respuesta a la obra de Gabriel Matzneff, un escritor pedófilo aplaudido por las élites francesas. Vanessa Springora le conoce bien porque mantuvo una relación con Gabriel tras ser seducida por él a los catorce años. Ahora, como dice María Fasce, editora de Lumen, la literatura ha vencido a su depredador.

Vanessa Springora nos cuenta «He escrito el libro para mí. Durante muchos años di la espalda a la literatura y a la edición. Pasó el tiempo, conocí a alguien, tuve un hijo y cuando mi hijo llegó a ser adolescente, me di cuenta de que lo que yo percibía como adulto a los catorce años no era real. A los catorce años no se es adulto. Entonces, pensé en lo fácil que es para un adulto seducir a un menor y surgieron las ganas de escribir».


Pedofilia en la literatura.

Cuando hablamos de pedófilos en la literatura, a todos nos viene a la mente la historia de Lolita de Nabokov. ¿Deberían, este tipo de libros, ser censurados? El testimonio de Vanessa en El consentimiento puede tener ciertos paralelismos con la famosa obra de Vladimir, pero hay una gran diferencia que no podemos pasar por alto: la historia de Springora es real. Totalmente real. No hay ficción. Además, Vanessa tiene muy clara la respuesta a la hora de condenar o no obras en las cuales aparecen este tipo de monstruos. «Todo escritor debe plantearse de qué se habla en su obra», nos dice, «Si son hechos reales o hechos imaginarios... Se puede escribir sobre monstruos, pero si el autor se reivindica como el monstruo que hay en el libro, ya es cuestión de justicia».

El libro de Vanessa Springora, El consentimiento, puede parecer controvertido de entrada. Un libro en el cual se narra la relación entre un depredador sexual y una menor de 14 años y, en donde, incluso, se atisba cierto toque romántico, a la par que la evidente denuncia por parte de la víctima, puede sacudir al lector y renovar el debate de si en literatura todo está permitido. Volviendo a obras como Lolita o El marqués de Sade, Vanessa dice: «No se pueden igualar obras de ficción con obras basadas en hechos reales».

El doble filo de la literatura.

Vanessa necesitó acompañamiento psicológico y, también, el acompañamiento de adultos que le ayudasen a volver a confiar en los adultos. El libro es la guinda del pastel, pues afirma su poder terapéutico. 

La literatura salva ahora a Vanessa como hizo entonces, pues, otra de las revelaciones de la autora, ha sido que a través de los libros de Gabriel Matzneff fue como descubrió que estaba siendo una víctima. Cuando se enteró de que mantenía relaciones sexuales con niñas, incluso, se sintió cómplice.

Y, mientras tanto, la intelectualidad francesa apoyando, otorgando premios y aclamando a un escritor pedófilo. ¿Por qué? Porque Francia era heredera de una época libertaria ligada al eslogan del 68 «Prohibido prohibir». Entonces, la pedofilia se equiparaba a la homosexualidad en el sentido de que era una mera orientación sexual. Además, como explica Springora, el escritor en Francia es una figura con un estatus especial, casi intocable. También, la autora, otorga a toda esa élite intelectual y política cierta presunción de inocencia: «Creerían que aquello era ficción».


Últimos detalles sobre El consentimiento de Vanessa Springora.

Sobre el proceso de escritura de El consentimiento, Vanessa Springora nos cuenta: «Empecé a escribir el relato de una forma diferente al principio, por eso he tardado tanto. Quería hacer algo parecido a Lolita pero poniendo la voz en la víctima, en la adolescente». Después, la autora sintió que se estaba despegando mucho de su propia historia e hizo varios intentos hasta llegar a la obra que se publicará el 17 de septiembre en nuestro país.

Por último, comentar que El consentimiento se llevará a la gran pantallaAl principio, Vanessa no era muy partidaria de hacer una película de la novela. Le hicieron varias propuestas y no le parecieron convincentes hasta que recibió una propuesta de una directora francesa. Esta directora, le mostró un DVD con la primera obra que rodó y Springora vio con cuánta delicadeza trataba en ella un tema, también, duro. Confía en que con su libro no haga una caricatura sino una película en donde aparezcan todas las ambivalencias de los personajes, porque también, hay una historia de amor que debe ser contada. Existe el riesgo de que la película traicione a la novela como ya ha ocurrido muchas veces, pero Vanessa ya se ha puesto en sus manos.