El sector editorial entró, a la vez que gran parte de las industrias de nuestro país, en cuarentena el pasado marzo de 2020. Esto significa que los principales canales de distribución como son las librerías cerraron y, por ende, no pudieron dar salida a las nuevas novedades ni tampoco recibir otras. Quienes tenían previstos lanzamientos o proyectos editoriales durante este año, se hacen, entonces, la gran pregunta: ¿es un buen momento para ello? ¿Se retomará toda la actividad de forma natural? Para responder a esta cuestión, he charlado con editores de distintos sellos sobre temas como el alcance que ha tenido la pandemia en su editorial, qué tipo de literatura buscan en estos momentos, qué medidas han tomado para capear el temporal, qué cantidad de contratos editoriales van a firmar dadas las circunstancias y qué consejo nos mandan en estos momentos, entre otros.

Crisis editoriales covid


CÓMO HA AFECTADO EL COVID-19 A NIVEL EDITORIAL

Este apartado comienza con cifras poco alentadoras, pues la mayoría de editores hablan de un descenso general de las ventas de libros en papel, lo cual, por otro lado, no nos sorprende. Las cifras de la caída de ventas varían entre el 20% y 60%, según la editorial. 

La editora de Versátil ediciones, lo explica muy bien: «Ha sido como frenar un tren en marcha. La industria editorial es una maquinaria que hay que alimentar constantemente para que pueda funcionar con sus peculiaridades. Es decir, que si un mes no publicas novedad, lo más probable es que tengas más devoluciones que ventas. Y eso es justo lo que ha pasado con el confinamiento. Sin novedades, los ingresos son mínimos, pero los gastos estructurales son prácticamente los mismos. Además del hecho de que las facturas de imprenta, traducciones, anticipos, correcciones, se pagan con mucha antelación a que el libro salga a la venta, por lo que antes de que una novedad genere algún ingreso, la editorial ya ha tenido muchos gastos».

Sin embargo, la tasa de lectura aumentó durante el confinamiento, como nos indican desde Maeva ediciones, señalando una cifra del 4%. ¿Cómo es posible? 

Quizás, Jesús Badenas, director de Grupo Planeta, lo puede resolver. Según Jesús, la caída de ventas en tienda ha sido evidente, pero el comercio electrónico ha aumentado y, en concreto, la venta de libros electrónicos. Al parecer, también las suscripciones digitales como Nubico han tenido mucho éxito. 

✅Una de las plataformas digitales que más ha vendido libros en papel ha sido La casa del libro.

Al hilo del libro electrónico, hablamos con la editora de Click ediciones, sello digital de Planeta. «En el caso de libros digitales no ha afectado en absoluto», nos comenta. «La ventaja de este formato es que la distribución ha seguido con normalidad ya que todo funciona online y, con el teletrabajo, nuestros proyectos han seguido adelante sin problema, así como nuestros lanzamientos».

✅Grupos editoriales como Penguin Random House llevan apostando por la digitalización de sus obras, así como en la creación de audiolibros, desde hace mucho. Casi todos sus títulos se pueden encontrar en estos formatos.

Pero, lo que más nos preocupa para la búsqueda editorial, tiene que ver con la reprogramación que se han visto obligados a hacer todas las editoriales. Novedades previstas para ciertos meses, han tenido que retrasarse por lo que, como de nuevo comenta Jesús Badenas, las novedades de 2020 se reducen. ¿Seguirán, por tanto, buscando nuevos manuscritos que publicar o serán más cautos, también, en la recolección de nuevas obra para sus catálogos?

LANZAMIENTOS Y CONTRATOS EDITORIALES.


El País lanzaba un artículo, el pasado mayo, donde ya advertía que el sector editorial se reactivaba con un tercio menos de novedades editoriales para 2020. Esto quiere decir que, muchos de los libros que se deberían haber publicado este año, pasarán a 2021. ¿Cómo afecta esto a la búsqueda editorial?

Las editoriales, llegados a este punto, no hablan de reducción drástica de los contratos, pero sí que señalan que los procesos serán más selectivos. Así nos lo cuenta la editora de Maeva ediciones: «A las editoriales nos siguen llegando manuscritos cada día, pero tanto los agentes como los editores son ahora muy selectivos. Tenemos que elegir muy bien qué publicar porque no sabemos cuál será el comportamiento del mercado ni cómo cambiarán los hábitos de compra de libros en los próximos meses».

Lo que sí debemos tener en cuenta es que los contratos que se realicen en 2020, con algunas excepciones, serán para publicar libros a partir de 2021. 

QUÉ TIPO DE LIBROS BUSCAN LAS EDITORIALES.


Los contratos que estoy firmando para mis escritores son de libros muy específicos, así que considero este apartado fundamental. No es que se estén reduciendo los contratos en 2020, sino que se intensifica el filtro del tipo de contenido que se acepta. Durante los meses futuros, las editoriales tienen que hacer apuestas fuertes, sacando títulos muy atractivos y muy demandados, no solo por ellos mismos, sino también por las librerías que esperan esa novela que reactive todo su negocio. 

Los editores nos cuentan. 

Desde Alienta editorial, buscan libros que se adecuen a las preocupaciones actuales. De hecho, nos indican claramente que están haciendo contratos a libros sobre la pandemia y los efectos de la misma. 

Alienta es una editorial de no ficción, por lo que su temática puede encajar muy bien con libros sobre la pandemia. El resto de editoriales, mantienen sus criterios habituales.

Desde Maeva ediciones, nos hacen una reflexión muy interesante: «La crisis sanitaria todavía no se ha reflejado en la ficción, no ha dado tiempo. Sí que se están publicando muchos ensayos y diarios sobre la pandemia, pero en ficción todavía falta la perspectiva necesaria para que los autores lo reflejen en sus novelas». 💥¡Ojo al guiño! ¡Nos puede servir de inspiración!

Desde Planeta, nos lanzan también algunas pistas de lo que integrarán sus planes editoriales, lo cual nos puede servir para saber si el manuscrito tiene cabida o no en los nuevos planteamientos:

  • Distopías, ya que tras situaciones surrealistas como las que hemos vivido, este tipo de libros cobran mucho sentido. 
  • Cómics de superhéroes o historias con héroes. 
  • Libros de desarrollo personal que traten temas laborales (ya que ahora es una preocupación inherente a lo que se está viviendo) o que aporten conocimientos de interés relacionados con las vivencias de 2020. 
  • Literatura juvenil e infantil, para crear hábitos lectores en los más jóvenes aprovechando estas situaciones. 
  • Se añaden los llamados «libros de confinamiento», con experiencias personales que narren lo vivido durante el confinamiento. Para mí, uno de los libros pioneros de este tipo de literatura ha sido Contagiado de amor.
⛔🚨¡Advertencia! Lo anterior son algunas pinceladas de los nuevos intereses, pero no es la línea editorial a rajatabla de ninguna editorial. 

CÓMO SE HA REINVENTADO EL MERCADO EDITORIAL.


Algunas editoriales, la forma que han tenido de reinventarse, es cambiando la línea editorial. Esto ya lo hemos comentado. Se prevé más literatura de ficción relacionada con la pandemia y un aumento de los libros de desarrollo personal en distintas áreas.

Versátil ediciones, por ejemplo, antes de la cuarentena, ya pensaron en dar un nuevo aire a su línea editorial. Nos lo explica su editora: «Hace solo unos meses, cambiamos toda nuestra página web y, ahora, también, ofrece la posibilidad de comprar online nuestros libros, con un packaging exclusivo y muy cuidado, envíos gratuitos y en el que siempre incluimos alguna sorpresa. Es tan solo una línea de negocio más que nos está funcionando muy bien sobre todo en la preventa de novedades y con aquellos libros que ya son difíciles de encontrar en las librerías. Además, seguimos colaborando con Storytelling para la producción de audiolibros y nos planteamos abrirnos a nuevas plataformas para la distribución de este formato. En cuanto a la distribución internacional, esperamos poder seguir creciendo en LATAM y poder confirmar algún que otro proyecto audiovisual que nos haría muchísima ilusión».


El grupo Penguin Random puso en marcha un servicio de dropshipping. Esto quiere decir que cuando un cliente solicitaba un ejemplar de un título del que la librería no tenía stock, se cursaría el pedido a través del sistema dropshipping de la editorial, indicando como punto de entrega el domicilio de su cliente, y la propia editorial lo mandaría a domicilio con acuse de entrega a la librería. La venta sería realizada por la librería y PRHGE serviría como proveedor.

Desde Maeva, también, han innovado: «En Maeva nos lanzamos a una aventura imprevista en los primeros días del confinamiento, publicamos EL CONFINADO, de Roberto Domínguez Moro, el primer thriller sobre el confinamiento, exclusivamente en e-book. El autor lo escribió a tiempo real durante los primeros días del confinamiento, en apenas quince días, y, en Maeva, sacamos el proyecto adelante en tiempo récord a finales de abril. Fue un soplo de aire fresco para el equipo y estamos muy contentos con el resultado».

CONSEJOS EDITORIALES PARA MANDAR UN MANUSCRITO.  


La mayoría de los editores hacen referencia a algo que me resulta realmente curioso, ya que es uno de los básicos a la hora de buscar editorial: la carta de presentación. Todos, en general, echan en falta una presentación por parte del autor más allá del cuerpo del mensaje que, también me comentan, suele ser escueto. Así lo expresa la editora de Click ediciones: «Como editora siempre echo en falta una carta de presentación. En ocasiones, recibimos un Word y en el mensaje un simple "para que lean". Ni una firma, ni su nombre, nada más».

También es importante que el autor contacte con editoriales que tengan su misma línea editorial. Siempre aconsejo que se haga un sondeo previo para saber a qué editoriales se va a enviar un manuscrito, pues no todas valen. Los envíos masivos no dan resultados, es mejor centrarse en unas pocas, conocerlas a fondo (incluso saber cuándo es el momento perfecto para enviarles la obra) y afinar el tiro.

Estos dos primeros consejos son atemporales. Sirven para cualquier momento. Sin embargo, la crisis del coronavirus ha obligado a algunas editoriales a tener también en cuenta el prestigio o la marca del autor, por lo que no está de más que, aunque seas un escritor novel, comiences a trabajar este aspecto. «En estos momentos, la marca de autor es importante», nos cuentan desde Maeva. «Las editoriales han regresado a las librerías con grandes nombres, con apuestas que tienen el éxito garantizado y autores que ya tenían un recorrido y muchas ventas».

Bien es cierto que labrarse una marca de autor lleva su tiempo. Pero tenéis algo mucho más potente a vuestro favor: el compromiso. La mayoría de editoriales buscan autores comprometidos. ¿Y esto en qué consiste? Me gusta mucho cómo me lo han explicado Labnar ediciones:

«Buscamos son autores comprometidos. Si han escrito el inicio de una saga, queremos que haya continuidad y regularidad en la publicación. Si han escrito una novela autoconclusiva, buscamos que siga creando nuevas historias y le incentivamos para buscar nuevos géneros en los que adentrarse o crear un nicho de lectores para sus novelas.

Francamente nos gustan los autores que trabajan en sus novelas, que quieren mejorar en cada publicación, que aceptan los consejos profesionales de los que llevamos años dedicados a este sector, y autores que siguen escribiendo con regularidad. Nos gustan aquellos que escriben al menos una novela cada dos años, manteniendo calidad en sus escritos, claro.

Los autores de un solo libro no tienen futuro en el actual mundo editorial».

La parte de las sagas es importante, ya que muchas veces no sabéis cómo presentar de forma correcta estos manuscritos. Cuando el libro que estás ofreciendo a una editorial forma parte de una saga, hay que añadir, mínimo, dos elementos a tu propuesta: 1) Temporalización de la escritura de los siguientes libros y 2) Documentos en donde se resuman en qué consistirán las siguientes entregas. Es decir, es necesario que en el mismo e-mail en donde les mandas el primer tomo de tu saga, también les adelantes cuánto tardarás en escribir los siguientes libros, para que la editorial sepa, más o menos, cada cuanto podría publicar un libro y de qué tratarán estos, ya que el primer libro de la saga puede ser una gran idea, pero el último no y la editorial necesita evaluarlo todo en conjunto. 

Para finalizar los consejos, me sumo a la editora de Versátil y yo también os advierto: Cuidado con el uso que hacéis de la palabra best-seller para referiros a vuestra persona. ¡Puede ser contraproducente!

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Muchas gracias a todos los editores que han participado en el artículo y han charlado conmigo tan amablemente sobre la nueva normalidad en el sector editorial.